Enérgico y alegre, Masaki Hinaoka, de 14 años, lleva a su corgi mascota a correr por las mañanas por la playa bañada por el sol naciente. De repente, los ojos de Masaki brillan de asombro: un chico rubio surfea, delicado e impresionante, con una leve sonrisa adornando su amable rostro. Al poco tiempo, Masaki vuelve a encontrarlo como un nuevo compañero de clase llamado Shou Akitsuki. Shou es un hábil surfista y lleva inmerso en este deporte desde su infancia. A pesar de que el surf es el pasatiempo preferido de la mejor amiga de Masaki, la despreocupada Nalu Tanaka, Masaki nunca ha mostrado interés en probarlo él mismo. Pero su admiración por el estilo de surf de Shou le inspira finalmente a probar las olas por primera vez, a pesar de no saber nadar. Sobre la tabla de surf, Masaki muestra un sorprendente potencial y talento para el equilibrio. Aprende rápidamente y acaba participando en una competición local, todo ello con Shou y Tanaka a su lado. Sin embargo, detrás de la amable sonrisa de Shou se esconde una sombra más oscura, que amenaza con abrumar a sus amigos. No obstante, Masaki se adentra sin miedo en el divertido mundo del surf, sin detenerse ante nada para ser el mejor.