A primera vista, la idea de que Kyouko Hori e Izumi Miyamura se lleven bien sería lo último en la mente de la gente. Al fin y al cabo, Hori tiene una combinación perfecta de belleza y cerebro, mientras que Miyamura parece manso y distante ante sus compañeros de clase. Sin embargo, un fatídico encuentro entre las dos deja al descubierto el lado oculto de ambas. Aunque es popular en la escuela, Hori tiene poco tiempo para relacionarse con sus amigos debido a las tareas domésticas. Por otro lado, Miyamura vive bajo las narices de sus compañeros, su cuerpo lleva tatuajes y piercings secretos que le hacen parecer un amable delincuente.

Con personalidades opuestas pero con extrañas similitudes, los dos se hacen rápidamente amigos y suelen pasar tiempo juntos en casa de Hori. A medida que ambos salen de su caparazón, comparten con el otro una parte de sí mismos oculta al mundo exterior.