Cuando la madre de Satsuki (Claire en algunas versiones) fallece, ella, su padre y su hermano menor se mudan a la ciudad donde su madre creció. Allí, Satsuki comienza a asistir a la misma escuela a la que iba su madre en el pasado, aunque en el nuevo edificio, ya que su madre fue a la antigua. Lo que Satsuki desconoce es que su familia materna posee un don especial para enfrentar a espíritus malignos, un talento que ella también ha heredado. Sin embargo, con la muerte de su madre, un árbol sagrado donde había encerrado a esos espíritus fue talado, liberando a los fantasmas capturados en la escuela, que Satsuki sin saberlo despierta con sus habilidades psíquicas.


Al percatarse de esto, Satsuki recurre a un diario que su madre llevaba a la escuela, descubriendo que, donde antes veía páginas en blanco, ahora hay información detallada sobre cada uno de los espíritus con los que deberá enfrentarse a lo largo de la serie. En su primera misión, comete el error de no leer toda la página que explica cómo sellar a los fantasmas, y termina atrapando a uno en el cuerpo de su gato, dándole forma física al espíritu. Aunque inesperado, esto resultará útil, pues si el espíritu (Amanojaku) desea liberarse y recuperar su antigua forma, deberá ayudar a Satsuki a sellar a los demás fantasmas, de modo que pueda regresar a su verdadera apariencia y escapar de su cuerpo de gato.