A altas horas de la noche, en un claro de un oscuro bosque lleno de niebla, se encuentra un guión gráfico de kamishibai. Un visitante se acerca y, de repente, la niebla se disipa. Una figura comienza a tomar forma junto al tablero: es el Cuentacuentos enmascarado, que una vez más empieza a hilar historias de horror y desesperación. Los sucesos descritos en estos cuentos macabros podrían ocurrirle a cualquiera, incluso a sus vecinos o amigos: un grupo de chicas acosa a una de sus miembros en una cueva, sólo para descubrir que son víctimas de una presencia oscura; un chico con escopofobia se muda al campo, pero aun así no puede escapar de los ojos de los demás; un hombre tiene una ventana que no permanece cerrada, y es el destinatario de extrañas llamadas telefónicas; y un asalariado roba un paraguas en un día lluvioso, pero este acto aparentemente insignificante conduce a consecuencias que nunca esperó. Los visitantes pueden disfrutar de las ofertas del Cuentacuentos, pero también deben estar atentos para no acabar siendo los protagonistas de su próxima historia.